China está apostando fuerte por el futuro de la inteligencia artificial (IA) al introducir clases de IA en escuelas primarias y secundarias de Beijing. A partir de este semestre, estudiantes desde los seis años recibirán al menos ocho horas de formación anual en uso de chatbots, fundamentos de IA y ética tecnológica. Esta estrategia busca replicar el éxito de figuras como Liang Wenfeng, fundador de DeepSeek, y fortalecer la posición del país en la «guerra global de la IA».
El plan, impulsado por la Comisión Municipal de Educación de Beijing, contempla integrar la enseñanza de IA en materias existentes o impartirla como asignatura independiente. También incluye el desarrollo de un currículo multianual y la creación de un sistema de apoyo y promoción para la educación en IA. Ya se han seleccionado 184 escuelas piloto para implementar estos programas.
China no está sola en este esfuerzo. Estonia, por ejemplo, firmó un acuerdo con OpenAI para implementar ChatGPT Edu en sus colegios, mientras que países como Canadá, Corea del Sur, Reino Unido y Estados Unidos también están integrando herramientas de IA en la educación básica, como libros de texto digitales, aulas de realidad virtual y asistentes de escritura basados en IA.
Sin embargo, organismos como Naciones Unidas y líderes educativos advierten sobre los riesgos de depender excesivamente de estas tecnologías, recordando que la educación debe mantener la «humanidad» en el centro y gestionar cuidadosamente los posibles riesgos.
El movimiento de Beijing marca una apuesta estratégica: formar desde la infancia a la próxima generación de innovadores tecnológicos que competirán en el escenario global de la IA.
Más información en el artículo de Emma Burleigh para Fortune.
